Llegan las lluvias, se caen las primeras hojas, ya está aquí el otoño. Para muchos es una época triste, y para otros, sobre todo los amantes de la montaña, es la mejor época del año. Lo cierto, es que cada estación tiene sus particularidades, y estas diferencias hacen que tengamos que tener algunas cosas en cuenta en el cuidado de nuestras mascotas.
En el caso de los gatos, en otoño tenemos que prestarles un poco de atención extra. En este periodo es cuando cambian el pelaje. Se les caerá progresivamente, y les saldrá un pelo más grueso y fuerte, de cara a protegerse del frío del invierno. Esto hace que tengamos que prestar atención a la higiene, a la alimentación y a la actividad de nuestros felinos estos días.
Los felinos se preparan para el frío
En otoño bajan las temperaturas, y aunque se trate de gatos caseros, su cuerpo se prepara para el frío. Por ello, además de la muda de pelo notarás cambios en el apetito, en el comportamiento y deberás preparar tu casa, con su camita o una mantita donde pueda (eso no significa que quiera) acurrucarse y estar a una buena temperatura, ni frío ni calor.
En esta época, también debes prepararte con la aspiradora, y los cepillos quitapelos que te ayudarán a tener tu casa y tu ropa limpias. Tienes que ser paciente, es normal que en otoño se caiga el pelo, a los humanos también nos pasa.
En otoño llega la muda de pelo de los gatos
Como ya hemos adelantado, uno de los cambios esenciales esta época es la muda de pelo, a los gatos se les cae su pelaje actual y les crece el pelo más fuerte y grueso. Para ayudar a nuestros gatos, lo mejor que podemos hacer es cepillar el pelaje cuando lo están mudando. Dependiendo del tipo de pelaje de tu gato, la raza y el tamaño, tu veterinario de HGVET te recomendará el cepillo más adecuado. La mayor diferencia son los cepillos para pelo largo y para pelo corto.
Los gatos se acicalan ellos solos, pero en muchos casos tragan grandes cantidades de pelo y pueden formársele bolas de pelo, que desembocan en otros problemas. Por eso, es recomendable cepillarles el pelo, además así crecerá más rápido y sano. Para detectar si tiene bolas de pelo hay varios síntomas que podemos detectar, el comportamiento será más desinteresado, enfermizo, comerá menos, vomitará, y dependiendo del tamaño de la bola puede incluso ocasionar hinchazón, diarrea o estreñimiento.
Control veterinario
En esta temporada del año, es una buena fecha para llevarlos a hacerse la revisión periódica veterinaria. Es recomendable llevar a tu gato al veterinario mínimo una vez al año, en gatos adultos se recomienda que sean dos veces en gatos sanos, y la que te prescriba el veterinario si tiene alguna afección. Los primeros meses de vida, cuando aún es cachorro, entre tres y seis veces es lo recomendable.
En otoño, estos felinos están más débiles y esto hace que sean más propensos a enfermar, e incluso poder ser infectados por otros parásitos. Su apetito suele bajar, lo cual es otro elemento para que estén más débiles, por eso tendrás que estar más pendiente de su alimentación y en algunos casos podrán necesitar algún suplemento o algún aporte extra.
En otoño continúan presentes los parásitos externos
Esto, no influirá tanto en los gatos caseros, ya que el riesgo, aunque existente es mínimo. Pero si tu gato sale al patio, al jardín o alguna zona al aire libre, ten en cuenta que este año la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) prevé un otoño más cálido, lo que hará que los parásitos externos estén presentes en la naturaleza.
Para combatirlos, es necesario hacer exploraciones a nuestro gato, en el pelaje, comprobar que no tiene garrapatas, pulgas u otros parásitos. Podemos observar su comportamiento, si se rasca, o si parece que algo le incomoda no está demás comprobar que no haya ningún agente externo molestándole. En caso de encontrar algún parásito lo más recomendable es acudir al veterinario, porque este puede haberle transmitido alguna enfermedad.
Los cambios de las estaciones y de las temperaturas nos afectan a todos. Concretamente, en el caso de los gatos la bajada de las temperaturas les afecta en varios aspectos. Es normal que estén más tranquilos y duerman más horas, es aconsejable, estar más pendientes de ellos e intentar que tengan un buen otoño.